lunes, 10 de abril de 2017

Cine USA de qualité (primera parte)



No podemos juzgar el cine estadounidense más que por aquel que nos sirven sus distribuidoras. No debe diferir mucho la política comercial fuera de casa en otras regiones del globo, y desde luego no en Europa o Latinoamérica, los dos mercados que conozco mejor.

Lo cierto es que el nuevo milenio es un festival de entretenimiento ligero y ruidoso en líneas generales. Disney se ha quedado con PixarLucas Films y Marvel, los reyes de lo que ahora entienden los despachos por "cine familiar". En la oferta apisonadora del otro lado del océano entran también las franquicias de Universal (Fast and Furious), las de Sony (especialistas en distopías post-apocalípiticas, tipo Elysium), los revivals de Paramount (Star Trek), los superhéroes más seriotes de Warner, las estrellas solitarias tipo Will Smith o Tom Cruise... Todo ello aliñado de mucha precuela, secuela, spin off y remake. Caso aparte son las películas "para el Oscar", que complementan a los pocos autores de un tiempo pasado (ScorseseAllen,...). La lana está en la película evento, es decir, la que se come una cuarta parte de las salas nacionales de un solo bocado.

Aún, así, Hollywood se empeña en ofrecer cada temporada su versión más tradicional o más a la moda de cine de qualité y aquí van dos muestras claras, con resultado aparente, críticas favorables y detalles muy de fábrica.


SULLY. El viejo Eastwood ya no tiene nada que demostrar, pero procura no cagarla porque tiene productora y fama de tacaño. Así que contrata a Tom Hanks pilotando por partida doble (avión y película) y escoge una noticia edificante y unos malos de manual (aerolínea y aseguradoras que pagarán la pérdida del airbus). La película no es más que una historia potente en su anécdota y estupendamente narrada en su desarrollo, como casi siempre en Clint (la de los cantores de Jersey no le quedó tan bien). Además, el newyorkino sale bien parado y eso que este ciudadano tiene reputación de ser el más borde de Estados Unidos (un poco como los parisinos en Francia).

Fotografía, avión, río Hudson, amerizaje, rescate, audiencia pública,... todo luce conocido pero solvente. Hanks sigue siendo el heredero de Stewart. Eastwood el de Hawks. La película, en medio del panorama antes descrito, parece una joya, aunque en otros tiempos hubiese quedado en el nivel medio de la tabla buena.


LA LLEGADA. Cada película estadounidense del director de Incendies me gusta menos que la anterior, siendo todas agradecidas de ver y fuertes de planteamiento. Pero los extraterrestres sin combate dan para lo que dan, Denis. Impresiona el primer encuentro, luego entramos en las noticias de países revueltos, los militares más o menos expeditivos, la madre sufriente/chica lista, los equívocos, la mano tonta de la Cía,... y así.

Excelente en la fotografía, la elección de intérpretes (de esos que aún combinan sagas comerciales con pelis de qualité a cara lavada), la música, el escenario,... la producción. Y con el toque trascendente hasta en la estética que la ocasión merece. Si la firma Nolan (otro de la qualité USA en su versión revienta-taquillas), nos la tragamos igual. De hecho, algún recurso suyo tiene. Malick sobrevuela los planos cortos de ella.

El Estudio contento, el espectador sin mucha memoria fílmica, también. De este modo, Hollywood sigue brillando, aunque el finlandés nos diga que ya está muerto y no lo sabe. 


4 comentarios:

  1. Comentario del finlandés Aki Kaurismaki, durante las entrevistas para promocionar su última encantadora marcianada.

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  2. Llevas retraso, pero coincido en tus cuatro últimas críticas

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  3. A mi me pasa igual con villeneuve...

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