Que haya costado 40 millones de dólares una película como ésta lo dice todo.
65 aguanta el visionado únicamente desde la mirada nostálgica sobre aquel cine serie B que completaba el programa doble en los tiempos en los que había de eso. Colocarte como espectador en tal posición permite (más o menos), tragar con los caprichos y agujeros del guión, con el innecesario recurso a nuestro planeta como "El planeta de los dinos", con los mil cabos sueltos, los personajes desaprovechados, los tajos de montaje que convierten situaciones prometedoras en asuntos zanjados por que sí.
Gracias a la química entre los protagonistas, algo tan flojo como 65 se deja ver tan rápido y fácilmente como se olvida. De hecho, solo han pasado tres días desde que la vi y apenas recuerdo a Adam encarándose el arma. ¿Los dinosaurios? no sé si son fieles a la zoología o híbridos de laboratorio, qué importa.
Lo de la nave, que para unas cosas está hecha mierda y para otras funciona como un cohete, lo ponemos también en la estantería de la serie B.
En menos de 65 años, nos la echan en Trece TV de relleno. En menos de cinco, nos la programa TVE a bombo y platillo como "La película de la semana".
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