lunes, 22 de agosto de 2016

La juventud


Un buen escenario: Suiza. Jóvenes atendiendo viejos en un retiro de salud y agüitas termales. Todos con actitud, sólo dos de ellos con voz. Para nuestra fortuna, esos son Michael Caine y Harvey Keitel, hablando de próstatas, fallos de memoria simulados, hijos incomprensibles, antiguos amores, desidia o entusiasmo, supervivencia y apuestas.

De vez en cuando ponen su pizca de talento interpretativo Rachel, Paul y Jane, sobre todo Jane, el tercer viejo de la partida. Todo ello con humor, desesperación, esteticismo y mala uva marca de la casa. La única amenaza es que Sorrentino empieza a gustarse demasiado, es autoconsciente en grado sumo –quizá no haya podido zafarse después de La gran belleza- y algunos elementos supuestamente desestabilizadores o epatantes son perfectamente prescindibles (Maradona sobra, la masajista entrenando bailes de videojuego no digamos).


Eso sí, el italiano consigue un momento para la historia del cine XXI en la secuencia de la piscina, porque una venus en las aguas (lo mismo da que salga o que entre), sigue produciendo en los espectadores una inevitable fascinación, aún con la próstata averiada.

He ahí un instante impostado, pero loable. En cuanto a las otras imposturas, juraría que Sorrentino y su montador necesitan discriminar entre lo bello y lo gratuito. Un balneario suizo no es Roma, Paolo.


8 comentarios:

  1. Gracias, Fernando.
    Como es obvio, no veré esta película.
    A un fan total de Rossellini como yo, alguien como Sorrentino le provoca alergias y picores por todo el cuerpo...
    Solo mencionándolo y ya me pican las piernas. Me voy a rascar, hasta otra.

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  2. Ya te decia que La Gran.. me entusiasmo y esta me horrorizo...cosas de la edad
    El terco de Leon sigue asi...terco con la Gran belleza... cosas de le edad tambien

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  3. Ya te decia que La Gran.. me entusiasmo y esta me horrorizo...cosas de la edad
    El terco de Leon sigue asi...terco con la Gran belleza... cosas de le edad tambien

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  4. Ya te decia que La Gran.. me entusiasmo y esta me horrorizo...cosas de la edad
    El terco de Leon sigue asi...terco con la Gran belleza... cosas de le edad tambien

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  5. Ayer precisamente en un cine de verano en pantalla gigantesca, volví a ver La Juventud por segunda vez. Lo reconozco el universo cinematográfico de Sorrentino me gusta. De momento solo he visto Un lugar donde quedarse (ahí lo descubrí), La gran belleza y La Juventud. Me llama la atención lo que cuenta y cómo lo cuenta. En ese balneario suizo disfruto con cada uno de sus detalles... Creo que Sorrentino bebe de Fellini (de nuevo aquí hay una presencia del director italiano, que también tiene su balneario particular en Ocho y medio) y de la parte melodramática y operística de Visconti. Ando detrás de Il Divo.
    De La Juventud disfruto de los personajes de Michael Caine y Harvey Kietel (mi favorito). Y me encanta el personaje de Rachel Weisz. Así como de muchos de sus momentos y diálogos, por ejemplo, el monólogo que le suelta la hija a su padre embadurnados de barro.

    Beso
    Hildy

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    Respuestas
    1. A mí de Rachel me gusta especialmente el momento más íntimo entre padre e hija, cuando ella decide decirle algo "muy personal". Creo que ahí es cuando recuperan la complicidad, si es que alguna vez la tuvieron antes de ese instante.

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  6. No le sobra nada.
    Lo estético por simplemente estético, también suma.
    Y es muy sorrentiniano, en Roma y en Suiza.
    No me digas, por favor, esas tomas de la gente tomando como ovejas sus tratamientos de salud...!!

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