jueves, 19 de septiembre de 2024

Asesino por casualidad


¡Qué manía tienen las distribuidoras de España con cambiar significantes y significados en los títulos de las películas anglosajonas! "Asesino a sueldo", que sería la traducción exacta del original, es un título mucho más irónico, pero alguien debe pensar que "casualidad" advierte mejor del género comedia. Como si les importara a estas alturas darnos gato por liebre.

Curiosamente, el principal problema que tiene esta película de Richard Linklater (a veces deja a sus estupendos personajes conversadores, desubicados y en crecimiento, para demostrar que puede dirigir a gentes con pistola), es precisamente el relacionado con el género, su dificultad de encasillamiento. ¿Es esta película una comedia?, ¿es thriller?, ¿es romántica?, ¿es comedia romántica, es comedia-thriller,...? Pues hay un poco de todo, aunque el humor negro sería el común a cada idea que hace avanzar la narración, a veces fluida, a veces a trompicones.

Se notan -sin molestar mucho- algunos elementos meramente instrumentales (su ex, varias lecciones académicas, la voz en off) o escenas  directamente prescindibles (alguna con los compañeros de trabajo encubierto, ese final fácilmente sustituible por tomas falsas). En fin, queda claro que Linklater brilla más y mejor en historias sin pistola. 

Con todo y eso, la película es bastante diferente al mejunje habitual que otros realizadores cocinan sin sonrojo para su inmediato estreno en Netflix. Ésta la ofrece Prime, que de momento parece una fórmula de plataforma más ecléctica, mientras la mayoría se retratan como voces monocordes de su amo.

Los protas bien, guapos y solventes. A sueldo por casualidad.   

No hay comentarios:

Publicar un comentario