La vi por fin en el Cine, como
quien va a comulgar. Librería inglesa (qué bonitas son, coño), libros de encuadernaciones
clásicas, con y sin sobrecubierta , Bradbury y Nabokov, una librera que prueba
el género, un lector huraño... En
principio, un festín para letraheridos.
Todo está bellamente rodado, el
reparto es solvente (el que ejerce de rata tiene papeletas para hacer pronto un
malvado de Marvel) y la esencia del relato es idónea y conmovedora. Sin embargo, algo no
acaba de funcionar. No es el ritmo, aunque sea contemplativo. Puede que las
relaciones entre los personajes, salvo la de la niña con la librera, sean
demasiado sobrentendidas. Quizá el pudor ante una obra maestra como La carta final, que ella seguro conoce,
impide a Isabel Coixet desarrollar más ampliamente lo mejor que tiene: el acercamiento
progresivo entre la librera y el viejo lector encerrado en su mansión. Un
caramelo que despacha en tres secuencias buenas, pero que saben a muy poco, porque encima
descubren las posibilidades de ese dueto interrumpido. Pasa algo similar con la
malvada y sus adláteres (sólo el general tiene el tiempo y trato que merece). Y
con el coraje, que cuando tiene que llegar, no llega.
Disfruté la película porque el
tema me gana de antemano. Pero esperaba un banquete delicioso y me encontré con
un rico canapé.
Y no estamos para despreciar canapés, vive Dios.
ResponderEliminarLe cogí manía a Coixet con aquella de Javier Cámara en el barco, tan cursilona y quejumbrosa, pero habrá que volver a su redil, es una buena directora.
A mí de Coixet sólo me han gustado mucho las dos primeras (Cosas que nunca te dije, Mi vida sin mí) y la de Kingsley y Cruz (Elegy creo que se titulaba). Lo demás no. Ésta está bien, digamos que a mitad de tabla. Y no cae en cursilerías.
Eliminarcreo que a las chicas nos llega y gusta más que a ti La librería
ResponderEliminar¡Pues no veas "La vida secreta de las palabras"!
ResponderEliminarSí, "Mi vida sin mí" estaba muy bien.
Un canapé de caviar pero canapé. No hagas caso al terco de León....
ResponderEliminarA mí no me acabó de gustar. Durante un rato parece de Woody Allen con el piloto automático. Luego simplemente se desliza hasta el final.
ResponderEliminarCoincido con lo que decís de Coixet y su filmografía, pero yo alcancé mi "hasta aquí hemos llegado" con "Mapa de los sonidos de Tokio".
Creo que se le tiene más manía de lo que te puede irritar su cine.
Puestos a hablar de españolas, "El autor" tiene fallos gordos pero la recomiendo.
Un saludo.